ESTABLECIENDO
LA PRIORIDAD EN NUESTRA VIDA
San
Mateo 6:33
INTRODUCCIÓN:
Diariamente debemos establecer la
prioridad en nuestra vida y seguirla durante toda nuestra vida.
I.
Busque
primeramente el reino de Dios y su justicia
Si establecemos la orden en nuestra
vida, todo lo demás nos será dado por añadidura. Lo más importante en nuestra vida es servir a Dios. No hay
nada más importante que servir a Dios en el mundo.
Mateo
22:37-38 dice “Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este
es el primero y grande mandamiento”
A. ¿Por qué debemos
servir a Dios primeramente?
Porque él es
nuestro creador, nuestro Padre Celestial.
Nuestra origen está en Dios, él es el centro, el gobernador de la historia, el que está en control de nuestra vida y muerte; Él es el soberano absoluto, el único
que nos
formó. En Isaías 44:24 dice “Así dice Jehová, tu Redentor, que te formó
desde el vientre: Yo Jehová, que lo hago todo, que extiendo solo los cielos,
que extiendo la tierra por mí mismo”, De
modo que es natural que sirvamos al Padre primeramente.
Asimismo él es el
quien
nos consuela en la tierra. El que también nos socorrerá
en tiempos difíciles. En Salmos 33:20 dice: “Nuestra alma espera a Jehová; nuestra ayuda y nuestro
escudo es él”, de manera que merece ser
servido en primer lugar.
Debemos servir el reino de Dios, porque
es el lugar que iremos cuando partamos del mundo. En Hebreos 11:6 dice “Pero sin fe es imposible agradar
a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea
que le hay, y que es galardonador de los que le buscan”. Nuestro lugar
natal no es la tierra,
sino el reino de Dios. En Filipenses 3:20 dice “Mas nuestra ciudadanía está en los cielos,
de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo”.
B. ¿Cómo debemos servir
a Dios?
-
Teniendo al Señor en el centro del trono de nuestro
corazón
-
Teniendo
conciencia de su presencia en todo momento.
-
Guardando el día del Señor, porque Jesús resucitó
en este día y buscó a los discípulos
y abriendo las puertas del cielo derramó el Espíritu Santo y estableció la iglesia. Así que no
deje de venir a la casa del Señor a adorar y servir al Señor, esta es la
voluntad de Dios. Trabaje seis días y el séptimo descanse para adorar a Dios. En San Juan
4:24 dice “Dios es Espíritu; y los que le
adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren”.
Es decir que debemos servir a Dios de todo nuestro corazón. También en San Juan
12:26 dice “Si alguno me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí
también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará”
-
Debemos
servir al Señor Jesús y a nuestro Padre Celestial con fidelidad. Pues dónde
está la riqueza también está nuestro corazón, significa que cuando acerquemos ante la presencia de Dios
no debemos presentarnos con las manos vacías. Porque la ofrenda es una manera de
demostrar nuestro amor por Dios. Pues, el servicio implica también esfuerzo, servir sin esfuerzo es como si estuviera jugando. En Malaquías 3:10-11 dice “Traed
todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora
en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas
de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. Reprenderé también por vosotros al devorador,
y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será estéril,
dice Jehová de los ejércitos”. Si en tiempo
pasado no diezmó,
hágalo ahora, hágalo
en este año 2013, comience desde ahora.
-
Y
la Palabra en Salmos 91:14-16 nos dice que debemos servir al señor
primeramente y entonces él será
conmovido. “Por cuanto en mí ha puesto su
amor, yo también lo libraré. Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi
nombre. Me invocará y yo le responderé. Con él estaré yo en la angustia; Lo libraré y le glorificaré Lo saciaré de larga vida, Y le mostraré mi salvación”.
Debe existir paz
entre Dios y nosotros para que también así llegue el bien, de lo contrario no
podemos gozar de las bendiciones del Señor.
II.
El hogar y la
familia
Muchos dicen que están tan ocupados que no tienen tiempo
de cuidar de su hogar.
Pero me pregunto ¿en qué están tan ocupados? Todo lo que el hombre hace debe ser para cuidar
y conservar el hogar. No debe confundir
entre la meta y el medio instrumento. La raíz de nuestra existencia
es el hogar. Nadie vino al mundo sin pasar por un hogar. Nacemos y
crecemos en ella.
De modo que si un hogar está pasando por problemas, todos los miembros que lo
conforman sufren las consecuencias. El Estrés, maridos o padres violentos, hijos
pródigos, Crisis económica,
todas estas situaciones negativas sacuden la estabilidad
del hogar. No hay paz ni felicidad
cuando no hay armonía
entre los miembros del hogar.
Sin embargo, que aunque no están viviendo
en una buena casa, no tenga buenas ropas y no se alimente bien, pero sí hay
amor mutuo y paz, entonces
ellos estarán felices.
En Proverbios 17:1 dice “Mejor es un
bocado seco, y en paz, que casa de contiendas llena de provisiones”.
Por tanto, para que el hogar esté en paz y en armonía debe haber respeto a los
padres. En Éxodo 20:12 dice “Honra a tu padre y a tu madre, para
que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da”.
Asimismo debe esforzarse por una buena
relación entre el marido y la mujer. En Efesios 5:33 dice “Por lo demás, cada uno de vosotros
ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido”.
La discordia entre el marido y la mujer
trae gran tormenta en el hogar. Porque después de una pelea en el hogar, no
podrá concentrarse en el trabajo. Discutirá ya sea con el jefe o con el
subordinado. Si trabaja en servicio de venta, estará con el ceño fruncido todo el día y nadie
querrá comprarle nada. Pero si el hogar está en paz, si el marido y la mujer están en armonía y en
paz, en dondequiera que ellos vayan serán bienvenidos y tendrán buenas relaciones con otras personas
también.
Según una investigación realizada sobre la felicidad del marido y la mujer, dice que la felicidad es
controlada por la boca y el oído.
Porque el hogar está formado por dos
personas totalmente diferente, deben esforzarse
arduamente para comprender uno del otro, de amarle y ser compasivo para que el hogar esté en paz y
armonía. Asimismo deberá siempre elogiarse el uno al otro. El marido sin cesar
deberá elogiar a su mujer y la mujer también buscar siempre los puntos
positivos del marido y elogiarle. Porque
una gota de miel puede atrapar más mosca que un kilo de hiel.
Las muchas reprensiones, enseñanzas y reproches no traen amor y paz al
hogar. Pero una sola palabra de elogio derrite el corazón del marido y de la
mujer para reconciliación. En la relación del marido y la mujer la boca y el
oído forman parte muy importante. Es decir qué escucha el oído y qué habla la
boca determina la relación. No escuche a la ligera mi sermón. Para vivir este año use correctamente la
boca y el oído. Esté atenta a las palabras de elogio y abra la
boca para elogiar a otro. Por muy eminente y excelente que sea el hombre
siempre se siente muy a gusto cuando escucha una palabra de elogio.
Debemos pedir la ayuda de Dios para que
él nos ayude a mantener una buena relación, una relación basada en amor,
compasión, armonía y paz. Porque como
el Señor Jesús estuvo en las bodas de Canaán está también hoy con nosotros. El
Señor que cambió el agua en vino, está hoy también con nosotros.
Para que el hogar esté en paz debe
dialogar y mantener una estrecha relación también con los hijos. Si está en guerra
con
los
hijos, tanto ellos como ustedes padres sufrirán con amargura.
En Efesios 6:4 dice “Y vosotros,
padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor”.
El 22% de los jóvenes en nuestro país
dijeron que no dialogan con el padre ni siquiera un minute en el día. ¿Cómo es posible? Dialogue con los hijos. Si
no educamos bien a nuestros hijos todo se
pierde, establezca buena relación con los hijos. La prioridad número uno es
servir a Dios y el segundo es servir al hogar.
III.
Atienda la salud.
Viva este
año con mucho interés en cuanto a la salud. Porque si pierde dinero, perdió poco; si pierde
el honor, perdió la mitad; pero si pierde la salud, perdió todo. Una vez un psicólogo
hizo la siguiente pregunta a las mujeres casadas ¿si ustedes se enferman y
están en cama quién se molesta más? Todos respondieron “mi marido” Ningún
marido le gusta
que su mujer esté en cama; pero si el marido se enferma, la mujer pasa
día y noche atendiéndole.
El principio del
éxito y la felicidad están en la salud. Pero la salud debe guardarse cuando
todavía está saludable. No trate de recuperar la salud cuando está enfermo;
guarde la salud cuando aún está saludable.
Se descubrió
tres característica importante en los
pueblos longevos de todo el mundo.
-
Que
comían tres veces al día ligeramente. Que son diligentes,
-
Siempre
estaban activos y
-
Mantenían buena relación familiar.
Estas tres características ocupaban primeros lugares de las personas longevas. Así que para que nuestra
vida sea llena de salud, debemos aprender a vivir con abstinencia. En especial los cristianos no vivan desordenadamente.
-
Evite
el alcohol…En Efesios 5:18 “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed
llenos del Espíritu” El consumo excesivo
de licor trae consecuencias drásticas como
el endurecimiento del hígado, cáncer del hígado, parálisis de los nervios y por último terminan destruyendo sus vidas.
-
Algunos
me preguntan “la Biblia no prohibe el cigarrillo, pero por qué usted lo prohíbe”
En la época en la que se escribió las escrituras no había cigarrillo; pero, el
cigarrillo contiene nicotina que a la larga produce cáncer. Se realizó una investigación
para saber cuán destructivo es la nicotina de un cigarrillo. Se inyectaron una
dosis de nicotina que contiene un cigarrillo a las ranas y todos murieron. Ese
veneno penetra al pulmón y al hígado. El 90% del cáncer del pulmón y el 95% de cáncer en la
laringe aparecieron en las personas adictas al cigarrillo. Y 11% de la mujer que fuma sufre de
esterilidad. Si todavía no puede dejar el cigarrillo quite 7 años a su vida,
está usted tirando
su vida al aire. Debemos
aprender.
El cuerpo es más
importante que la comida o el vestido. Por tanto, guarde la salud.
Conserve la paz siempre que pueda,
porque el odio y los celos agitan el corazón. Por mucho que usted odie o cele, la otra persona no será lastimada.
Mas el corazón que odia recibirá mucho estrés que
causa hormonas destructivas. Hermanos por eso dice en Efesios 4:32 “Antes sed benignos unos con otros,
misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a
vosotros en Cristo”
Por tanto, esfuércese mucho para vivir en paz.
IV.
El trabajo y los
negocios
Primero Dios, segundo el hogar, tercero la salud y el cuarto
es el trabajo. Así debe ser la orden de
su vida. Esta es una manera de vivir correctamente ante Dios. Entienda que
somos administradores de Dios. Dios nos da diferentes dones, así dice en I
Pedro 4:10 “Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a
los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios”. El trabajo y los negocios
son la obra que Dios nos ha encomendado. El trabajo
no es solamente una manera de sobrevivir la vida, es cierto que por ella nos
alimentamos.
El trabajo es
una manera que usa Dios para alimentarnos; por tanto debemos ser fieles en ella. El trabajo
también nos trae sueño sobre nuestro futuro. Que será doctor, que será abogado,
que será farmacéutico. Hay sueño en ella. De allí la importancia del trabajo.
Cuando alcanzamos el sueño nos sentimos a gusto y realizados.
Que nosotros
servimos al Señor por medio de nuestro trabajo también. Conforme al poder
busque el trabajo ante Dios.
V.
La afición y los
pasatiempo
Por último tenemos
la afición y los pasatiempos. Es cierto que la afición y los pasatiempos ocupan el último
lugar, pero es necesario para nuestra vida. Porque la afición personal actúa como lubricante para nuestra vida. Si
pregunto a alguna persona qué afición tiene,
me contesta que la TV y la
Internet. Pero esas aficiones son peligrosas. La adicción a la TV y la Internet
no son aficiones sino
enfermedad moderna. Un 61.8% sufren de adicción a la Internet, ésta causa
discordia en una pareja, amenaza a los jóvenes con malas influencias; así la Internet está actuando de una manera muy peligrosa
y destructiva. Un 82%
de padres de familia que cuentan con niños en la escuela contestaron que temen que las diferentes páginas lujuriosa y
violencia puedan destruir a sus hijos.
La TV. Hipnotiza a algunos… “una pareja joven fueron a almorzar a un restaurante con sus dos pequeños hijos,; una niña de 3 y un niño de de 1 año y medio, tienen la mesa servida y la televisión encendida, oran y comienzan a almorzar, es esposo, está concentrado en la película, trata de partir la carne con su cuchara y no puede e intenta llevar a la boca para morderlo pero cuando mira su cuchara era su zapatito de su hijo, quien antes de que se de cuenta el bebé ha dejado sus zapatos en
la sopa”
La afición y los pasatiempo deben ser una manera de disfrutar juntos.
Escuchar música, pintar cuadros, viajar.
Los pasatiempos son una manera de llenar la energía
a las parejas.
Hubo dos leñadores, un leñador salió
temprano a la mañana hasta tarde y
cortó la leña sin descanso; mientras que el otro cortaba la leña y descansaba
de tiempo en tiempo. El primer leñador pensó entonces que aquel es un haragán.
Pero cuando llegó la noche y se dio cuenta que aquel
hombre cortó más leña que él. Extrañado le preguntó ¿cómo es posible? y él le contestó que mientras
que él cortaba la leña sin descanso con la hache embotada, él en su tiempo de
descanso afilaba el hacha. Mientras que el primer leñador golpeaba el árbol
diez veces para cortar, el otro lo hacían solamente dos.
El recreo es una
manera de afilar la hacha, porque si tiene la hacha embotada se tomará mucho
tiempo para cortar el árbol. Los pasatiempos son una manera de disfrutar la
vida para rubricar su vida.
Oración
Dios llenos de amor y santo, muchas veces vivimos en
desorden. No sabemos cuál es la prioridad en nuestra vida, todo está enredado
como una madeja de hilo. Y esto trae discordia
en el hogar y en el individuo, levanta contienda y
discusión. Ayúdenos oh Señor a establecer prioridad en nuestra vida, para
glorificarte siempre. Oramos en el nombre de Jesús. Amén.